Ken Robinson arroja luz sobre el proceso creativo en su libro “Busca tu elemento”:
- Hoy, más que nunca, las comunidades humanas dependen de una diversidad de talentos, y no de una única idea de capacidad.
- A medida que los niños van creciendo, su cerebro se adapta según el uso que le den o que no le den.
- Cuando las personas encuentran su medio, descubren sus auténticas dotes creativas y llegan a conocerse. Ayudarlas a conectar con sus cualidades creativas personales es la forma más segura de liberar lo mejor que poseen.
- En un sentido por lo menos, los seres humanos somos radicalmente distintos del resto de los seres vivos de la Tierra. Tenemos la capacidad de imaginar. Y, en consecuencia, poseemos unos poderes de creatividad ilimitados.
- La creatividad conlleva poner en funcionamiento la imaginación. En cierto sentido, la creatividad es la imaginación aplicada.
- Vemos el mundo no como es, sino a través de un velo de ideas preconcebidas.
- La creatividad es el proceso de tener ideas originales que posean valor.
- Quien no esté dispuesto a equivocarse es improbable que alguna vez idee algo original.
- En el momento adecuado y de la forma correcta, la apreciación crítica es esencial. En un momento inapropiado, puede acabar con la idea emergente.
- La capacidad creativa es esencialmente humana y mantiene la promesa constante de formas alternativas de ver, de pensar y de hacer.
- La creatividad pasa por diferentes fases. No se puede producir una versión acabada en un solo paso. Ignorarlo puede llevar a la persona a pensar que no tiene ninguna capacidad creativa.